Es muy probable que tú, al igual que yo, produces música en espacios modestos. A veces, nuestras habitaciones no son tan espaciosas como los estudios profesionales, pero no te preocupes, hay formas prácticas y emocionantes de mejorar tus mezclas incluso en esos rincones con espacios reducidos.
Algunos de los tips que voy a darte no siempre están al alcance, pero algo es mejor que nada, y seguir dando pasos aunque sean pequeños es clave para un crecimiento sostenido.
De mis mejores consejos está el tener una Referencia de EQ y Compresión para la toma de decisiones, te regalo la que yo uso: REFERENCIA DE EQ Y COMPRESIÓN
1. Aprovecha el Poder de la Calibración de Altavoces
Comencemos con algo realmente poderoso y fácil de implementar: el uso de software de calibración de altavoces.
Puedes utilizar herramientas gratuitas como Room EQ Wizard para ajustar tus altavoces según las características únicas de tu habitación.
Este no es un truco mágico, pero puede marcar una gran diferencia y hacer que lo que ya tienes suene espectacular. Y aunque sí se requiere cierta inversión en un micrófono de medición (entre 100 y 300 USD) más algo de equipo de home studio básico, es mucho más asequible que un tratamiento acústico profesional para tu espacio físico.
2. Mezcla a Volumen Bajo para una Experiencia más clara.
Al mantener un volumen moderado, puedes evitar problemas no deseados y asegurarte de escuchar cada detalle. En habitaciones pequeñas, monitorear a volúmenes altos puede exacerbar las limitaciones de tus equipos.
Es decir, a mayor volúmen, mayor peso le das a la acústica del cuarto y eso no lo queremos. Si disminuyes el volúmen reduces el factor del espacio físico y tu percepción será mucho menos afectada por las reflexiones del lugar.
Además. obligas a tu oído a ser mucho más preciso al escuchar el tema musical, generamente a mayor volumen menor objetividad auditiva. Tendemos a escuchar como "mejor" aquello que tiene más volúmen, lo cual es completamente un engaño.
3.- Toma descansos y sal del lugar.
No subestimes el poder de salir de la habitación o incluso de tu casa. Este truco clásico te da una nueva perspectiva al escuchar tu mezcla desde fuera. Al alejarte del sonido directo, podrás evaluar mejor el equilibrio de los elementos y concentrarte en lo que realmente importa.
Puedes tener una caminata solo o con alguien más, aprovechar para atender pendientes que nada tengan que ver con la música. El asunto es salirte completamente del contexto musical para refrescar tu mente y tus oídos.
Estos descansos pueden ser desde algunas horas hasta quizá 1 o 2 días. Notarás una diferencia importante al estar nuevamente en tu estación de trabajo.
5. Auriculares de Confianza: Tu Compañero en Pequeños Espacios
Cuando las condiciones acústicas no son ideales, recurre a buenos auriculares. Aunque no son la solución única, pueden ser tu salvación. Elije auriculares de diadema abierta para una respuesta de frecuencia más precisa y menos fatiga auditiva.
No necesariamente tienen que ser audífonos de estudio o de gama alta. Lo más importante es que sean aquellos que domines bien, que estés tan familiarizado que sabes reconocer cuando algo no anda bien en una mezcla.
Recomiendo que sean los mismos en los que escuchas música ocasionalmente para que tus oídos tengan cierto "entrenamiento" auditivo y que, al andar algo mal, puedas fácilmente detectarlo.
6. No Te Preocupes Tanto por los Graves con Altavoces Pequeños
En habitaciones pequeñas, los graves pueden ser un desafío. Pero, ¿sabías que la mayoría de las decisiones importantes se toman en el rango medio? Concéntrate en esa parte y utiliza otros medios, como auriculares o monitoreo externo, para ajustar los graves cuando sea necesario. La clave es trabajar con lo que tienes y aprovechar al máximo cada elemento de tu mezcla.
En ocasiones me preguntan sobre el uso de Subwoofer en el Home Studio. No es del todo una mala idea, puede ayudar. Pero recuerda, las frecuencias graves son las más complicadas de tratar y controlar.
Mientras más simple puedas hacer el proceso, mejor.
Recuerda, ¡la creatividad no tiene límites, incluso en espacios pequeños! Lo más importate no es el equipo o el espacio con el que cuentas, sino que estés en un constante crecimiento, aprendizaje y entrenamiento. De manera que no importe si mezclas desde un super estudio con un gran tratamiento acústico y equipamiento, o si lo haces desde una laptop y unos audífonos sencillos.
A darle.
Carlos, SuenaPRO.